Las habitaciones son espaciosas con mobiliario contemporáneo en tonos suaves y acogedores. Imágenes de paisajes y monumentos locales adornan las paredes y evocan la esencia de dónde estamos.

Las casitas en el área del jardín acomodan nuestras doce habitaciones. Las habitaciones son espaciosas, con mobiliario contemporáneo en tonos suaves y cálidos. Imágenes de puntos de referencia locales adornan las paredes y nos recuerdan la esencia de donde nos encontramos. 

Deluxe Room Double Bed

Decorada en tonos suaves y cálidos, con decoración de estilo caribeño. Esta habitación tiene una cama doble, su propio baño, aire acondicionado, abanico de techo, agua caliente, televisión pantalla plana y cable TV. 

Deluxe Room Two Double Beds

Decorada en tonos suaves y cálidos, con decoración de estilo caribeño. Esta habitación tiene dos camas dobles, su propio baño, aire acondicionado, abanico de techo, agua caliente, televisión pantalla plana y cable TV.

Para celebrar Montecristi, cada habitación lleva el nombre de los lugares, puntos de referencia locales, flora y fauna que nos rodea.

El Reloj

El reloj de Montecristi es un emblema de la ciudad y nos recuerda la época de prosperidad económica experimentada a finales del siglo XIX.

 

Fue construido en Francia por el reconocido relojero Jean Paul Garnier y originalmente estuvo en operación en la ciudad francesa Saint-Germain-en-Laye. Cuando fue adquirido por el ayuntamiento de Montecristi, fue desmantelado y transportado en buque de vapor y tren hasta su ubicación actual.

Fue instalado en marzo 11 del 1895 e inaugurado el 26 de junio del mismo año. Con una altura de 96 pies y forma de botella de champaña, su estructura de metal se eleva orgullosamente en el centro de la ciudad marcando el ritmo del tiempo.

El Chivo

El chivo es un ícono en la región oeste de República Dominicana, donde es muy profuso y emblemático de su gastronomía.

Se caracteriza por su sabor peculiar que resulta de las condiciones donde se cría y la ingesta de orégano silvestre en su dieta.

El Yaque

El río Yaque del Norte es el más largo de la República Dominicana.

Origina en la Cordillera Central y fluye a través del Valle del Cibao, por el oeste de Montecristi y hacia la Bahía de Manzanillo.

Cuando Cristóbal Colón lo divisó en su primer viaje a América lo bautizó como el Río de Oro por las pepas preciosas que encontraron allí.

Los Caños

Estos canales de agua recorren desde la ciudad de Montecristi, atraviesan el Parque Nacional El Morro y desembocan en el Océano Atlántico.

Rodeados de manglares, albergan abundantes especies de vida silvestre incluyendo manatíes, estrellas de mar, canarios y cangrejos. Son poco profundos, variando entre 1.5 y 3.5 m. El fondo está cubierto mayormente de algas marinas y hay algunas piscinas naturales de agua cristalina y fondo de arena donde se pueden disfrutar refrescantes baños.

La Granja

Cuando Cristóbal Colón dibujó el primer mapa conocido del área, llamó esta ensenada La Grange; quizás porque a algún miembro de la tripulación se le pareciera al lugar en Francia con el mismo nombre.

Su playa se extiende desde Caño Embarcadero hasta El Morro, con algunas interrupciones en el camino.

La Pipa

Durante la colonización de América numerosos galeones repletos de tesoros y mercancías navegaban la ruta al norte de la costa de Montecristi.

Muchos de ellos fueron varados en los bancos de arena y los arrecifes, sufrieron ataques de piratas, o las inclemencias de las tormentas tropicales.

En la costa de Montecristi hay más de 200 embarcaciones hundidas y la costumbre ha sido bautizarles de acuerdo al contenido de su carga. Entre ellos podemos encontrar el Barco de las pipas, el Barco de los cristales, el Barco de las bolas de mosquete y el Barco de los cañones.

Manglar

Los manglares de Montecristi son los más extensos de República Dominicana. Su extensión es equivalente a 40% del total de la cobertura de mangles del país.

Son importantes ecosistemas que proveen un hábitat natural para muchas especies de flora y fauna, así como protección ante inundaciones y erosión costera.

El Morro

El Morro de Montecristi se proyecta en forma imponente como un centinela de la antigua ciudad fundada por Nicolás de Ovando y bautizada San Fernando de Montecristi en honor al Rey Ferdinando II de Aragón.

Con vista a kilómetros de costa, el promontorio parece un gran camello acostado. Desde su cima los visitantes pueden divisar la bahía y Cayo Siete Hermanos.

En su ladera sur hay un sistema de canales con manglares y lagunas rodeados de vegetación subtropical seca y su respectiva flora y fauna.

Es sin dudas un lugar encantador, altamente apreciado por amantes de la naturaleza quienes se asombran por la variedad y belleza de este continente en miniatura.

Mariposa

La pintoresca mariposa amarilla que abunda en la región es un bello espécimen que nos da la bienvenida al llegar a Montecristi.

Las mariposas reflejan el estado de conservación, diversidad y endemismo, así como el estado de intervención o degradación del ecosistema natural. Por lo tanto, su abundancia en la región resalta sus importantes atributos ambientales.

Salinas

Montecristi es el mayor productor de sal marina en República Dominicana.

Parte de la planicie costera está bajo el nivel del mar y esto permite que el agua penetre las terrazas donde aún se produce la sal con la tradición artesanal.

Siete Hermanos

Ubicado al noroeste de la costa de Montecristi, Cayos Siete Hermanos es un archipiélago de siete islotes declarado refugio de vida silvestre. Estos albergan corales, fauna marina, y aves migratorias que anidan durante los meses de verano.

Sus nombres son Monte Grande, Monte Chico, Tercero, Muertos, Ratas, Arenas y Tururú. En Cayo Ratas se mantiene en pie un faro de antaño que guiaba a los navegantes cuando las costas de Montecristi figuraban entre las rutas de navegación más importantes del país.

Es un excelente lugar para practicar el snorkel, buceo diurno y nocturno, así como el avistamiento de aves.

Corales

Los arrecifes del Parque Nacional Montecristi son reconocidos como los más extensos, diversos y mejor preservados en la República Dominicana.

A lo largo de la costa se extiende un arrecife de barrera desde Punta de la Granja (El Morro) hasta la playa de Punta Rucia, representando la mayor barrera de coral de las costas del país, y presenta una estructura y composición faunística muy distinta a las del resto del Caribe.

La tarifa oscila entre US$80 y US$95 por noche para ocupación doble dependiendo de la fecha / estación. Aplican impuestos.